El lumbago es uno de los dolores más molestos que hay. Siempre es importante la prevención y saber la causa que lo origina con el fin de poder seguir un tratamiento adecuado y que evite que se sucedan los episodios. Sin embargo, una vez que ha hecho su aparición, ¿qué puede hacerse para aliviar el dolor? Normalmente, el médico pone un tratamiento, aunque también es posible combatirlo y complementarlo con otra serie de remedios.
Cuidados
Uno de los mejores cuidados que puede hacerse es aplicar calor en la zona con el fin de relajar toda la musculatura, sobre todo, cuando se está en una fase aguda o bien el dolor es muy intenso.
Este calor es mejor que sea seco, siendo preferente el uso de mantas eléctricas o bien bolsas de agua caliente y siempre que no toque el líquido esta zona. En cualquier caso, deben ponerse durante un tiempo de unos diez minutos varias veces al día aunque, si la zona está muy roja, es conveniente esperar, al igual que sí está muy inflamada.
Productos naturales
Además, se pueden tomar una serie de productos naturales, que se venden en farmacias o parafarmacias y que contienen, por ejemplo, harpagocito, que son raíces de harpagocito para ingerir, aunque también es posible emplearlas por la vía tópica.
También es muy efectivo dar masajes con consuelda, lo que es posible hacer durante cuatro o cinco veces días al día porque igualmente contribuye a aliviar el dolor, pero cuidado con presionar demasiando en la zona. Debe extenderse con suavidad.
Las flores de árnica son muy útiles para tratar el dolor, además de tener un importante poder antiinflamatorio. A través de cremas o geles es fácil de aplicar. Y, aún hay otro pirncipio activo: el fruto del pimiento, que tiene un efecto antidolor nada desdeñable. También el aceite de cayeput ejerce poder antiinflamtorio y analgésico.