El recibidor y el pasillo son dos estancias con características diferentes a otros rincones de la casa. En esencia, son zonas de paso. Es decir, no son lugares en los que las familias permanecen de forma habitual, sino que sirven de medio para llegar de un punto a otro. Además, no suelen ser espacios muy amplios. ¿Cómo hacer que el recibidor o el pasillo parezca más grande?

1. La importancia de las puertas de interior

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Las puertas de interior que se integran en ambos puntos son esenciales para reforzar la continuidad visual con otras habitaciones. Por ejemplo, aquellos modelos que están decorados con vidrieras potencian el paso de la luz y dejan ver la decoración que se sitúa al otro lado. Por tanto, no crean una barrera definitiva, sino que delimitan la estancia generando una agradable sensación de apertura.

2. Elige un punto focal bonito

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Aunque la decoración del recibidor o el pasillo sea muy sencilla, puede ser muy original. Para ello, el proyecto decorativo requiere de un buen punto focal. En definitiva, decide qué elemento va a destacar a nivel visual en cada uno de los lugares mencionados. Puedes crear una perspectiva atractiva a través de la decoración de las paredes.

En consecuencia, cuadros, láminas y fotografías embellecen y personalizan las zonas de paso. Un espejo es otro complemento que aporta un interesante efecto estético en este contexto. Ten en cuenta que puede servir para añadir profundidad a pasillos y recibidores.

3. Muebles suspendidos para pasillos y recibidores

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Aunque el pasillo o el recibidor sea pequeño, es posible equiparlo con un mobiliario básico que potencia el orden, el almacenaje y la organización. Sin embargo, es importante establecer una comparativa entre distintos formatos y modelos para seleccionar aquellos diseños que se ajustan muy bien a las medidas del plano.

Los productos que no tienen un peso visual muy llamativo son un acierto en la decoración de esta parte del hogar. Por esta razón, los muebles suspendidos están muy de moda puesto que realzan la amplitud en pisos pequeños.

4. Paredes de color claro

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El color de las paredes es uno de los aspectos que influye directamente en la visión general de una estancia. Pero cuando los metros cuadrados se reducen, también se limita el campo de posibilidades a nivel cromático. Es decir, es aconsejable descartar aquellos tonos oscuros que quitan luz o sensación de amplitud a pasillos y recibidores.

Por el contrario, es preferible realzar la claridad por medio de tonos que marcan tendencia en la actualidad: el blanco, el beige o el gris claro. Eso no significa que debas apostar por un look monocolor, es decir, puedes combinar diferentes tonalidades. Pero una de ellas, la opción predominante, debe ser un símbolo de luz.

5. Minimalismo y sencillez

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¿Cómo lograr una decoración que realza la mejor versión de las estancias mencionadas? Evita recargar las zonas de paso con muchos adornos. Es decir, pon el acento en la belleza de lo sencillo a través de una propuesta más minimalista. En otras estancias del hogar puedes experimentar con más estilos de decoración. El minimalismo combina muy bien con otros enfoques creativos.

6. Jarrones de suelo para pasillos y recibidores

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Hay diferentes propuestas de decoración que es mejor descartar en pasillos y recibidores pequeños: aquellas ideas que quitan sensación de amplitud en el conjunto. Por el contrario, conviene dar la bienvenida a aquellas fórmulas que embellecen el contexto. Dentro del mundo de los complementos, los jarrones de suelo consiguen ese efecto tan atractivo. Es un adorno que queda perfectamente enmarcado en un rincón o en una esquina de las zonas de paso que hemos analizado a nivel decorativo.