Igual que hay plantas de interior y exterior, también hay muebles para dentro y fuera del hogar. Hay casas que cuentan con terrazas, patios al aire libre, jardines… que, aunque pueden cubrirse con algún techo o cerrarse (como es el caso de los balcones), no dejan de estar más expuestos a la intemperie que otras zonas del inmueble.01Ahora que el invierno está ya a la vuelta de la esquina, apetece disfrutar de los espacios interiores de la vivienda y abandonar los exteriores. A diferencia de las estaciones intermedias, en las que las temperaturas no son ni de frío ni de calor, el invierno trae consigo lluvia, nieve, humedad, heladas… que suponen un riesgo tanto para las personas como para el buen estado de los muebles que tenemos por casa. Incluso, quien no tiene una casa con alguna dependencia al aire libre, pero sí tiene un negocio con terraza (ya sea un restaurante o un hotel), necesita muebles de exterior y muebles de jardín con los que decorar estos espacios. Así pues, si se quiere que el mobiliario perdure, es necesario protegerlo de alguna manera.
Aunque los muebles de madera normalmente se barnizan, para conferirles cierta protección más allá de mejorar su acabado, requieren igualmente de un sistema que permita conservarlos en buenas condiciones. Las inclemencias del clima son las que pueden jugar más estragos en los muebles y hacer que su vida útil se acorte. Por eso, muchas personas recurren a las fundas para muebles de exterior y jardín, por las ventajas que ofrecen a la hora de conservar el mobiliario en buenas condiciones durante todo el tiempo que dure el invierno, el cual se espera que este año entre el 22 de diciembre para marcharse el 20 de marzo del año siguiente.
Estas fundas protectoras son válidas para tumbonas, sillones con brazos, conjuntos de mesa redondas con cuatro sillas, sofás de hasta tres plazas… En definitiva, son muy variadas y se ajustan a cada clase de mueble. Si hay animales cerca, aparte de resguardar el mobiliario de las inclemencias del invierno, también pueden protegerlo de las deposiciones de las palomas o de los perros que haya en las inmediaciones de la ciudad. De esta manera, los ácaros, el polvo, la lluvia, la nieve, el rocío… caen sobre la funda y no, sobre el mueble. Además, son fundas para muebles de exterior y jardín fáciles de lavar.
En este punto conviene matizar que las fundas que ofrece Digebis no están pensadas para poder sentarse en ellas. No son las habituales fundas que protegen el mobiliario únicamente de forma parcial, permitiendo hacer uso de él mientras tanto, sino que han sido diseñadas para resguardar cada mueble al máximo. Su apariencia externa recuerda más bien a una caja fabricada en polipropileno no tejido con revestimiento de polietileno.
Sólo así se logra una protección 100% efectiva del mobiliario, con unas fundas que (como las de Digebis) cubren el mueble por completo, siendo además fundas para muebles 100% impermeables.
¿Cuándo comprar fundas de este tipo para muebles?
Las fundas protectoras EASY-COVER están fabricadas con un tejido muy resistente que protege el mobiliario de la radiación solar, algo que conviene tener muy en cuenta en un país como España, con regiones donde el sol no se despide ni en invierno. Por tanto, entre los principales motivos para adquirir una de estas fundas, podemos encontrar:
1- Proteger los muebles de los rayos UV. Las fundas son muy necesarias en espacios exteriores donde el sol es una constante, incluso en invierno. Por ejemplo: las sillas de plástico de las terrazas de algunos bares pueden calentarse perfectamente si reciben el sol del mediodía, disminuyendo la vida útil del mueble. En el caso de los muebles que están tapizados, las fundas pueden ser útiles para evitar que el estampado de la tapicería se decolore.
2- Proteger los materiales de la humedad. En el caso de la madera, las fibras pueden absorber la humedad y el agua. Así pues, la madera se hincha y puede llegar a cultivar moho. Además, aparecen manchas y proliferan las bacterias. La lluvia también resulta perjudicial para los muebles de metal, que pueden oxidarse. Para proteger el mobiliario de la corrosión y de los hongos, basta con cubrirlo completamente con una funda EASY-COVER, hasta que vuelva a utilizarse cuando llegue mejor tiempo.
3- Para muebles de exterior de una sola pieza o modulares. Estas fundas son una opción práctica y efectiva tanto para sofás de una única pieza, sillones, sillas, mesas, conjuntos de mesa y sillas, sillas apilables, tumbonas, como para muebles modulares.
4- Alargar la vida del mobiliario exterior sin que protegerlo signifique tener que trasladarlo a un trastero, garaje o cobertizo. Las fundas EASY-COVER, aparte de evitar el desgaste, nos ahorran tiempo y esfuerzo. Cuando el mueble ya puede utilizarse sin riesgo de mal tiempo, basta con quitar la funda que lo ha protegido durante el invierno y volver a hacer uso del mueble.
El propileno no tejido: las fundas de Digebis
Digebis es una empresa distribuidora de productos de jardinería. Su actividad profesional se divide en dos áreas. La primera recoge artículos para centros especializados en jardinería, bricolaje y venta online. Y la segunda, artículos para profesionales del paisajismo. Con respecto a sus fundas, las de Digebis son de propileno no tejido. Las ventajas de las telas de propileno (un material plástico) son las siguientes:
1- Tejido flexible.
2- Resistente al calor y a la humedad.
3- Estabilización térmica (tiene propiedades aislantes).
4- Baja conductividad eléctrica.
5- Como es un material que ha pasado por muchos procesos, aunque en su origen procede del petróleo (materia orgánica), no atrae polillas ni microorganismos.
6- Las fibras de PP (polipropileno) son resistentes: una importante ventaja a considerar tratándose de muebles de exterior, los cuales no tienen el resguardo de un mueble de interior.