Muchas veces al seguir pautas de alimentación o bien porque se hacen dietas demasiado restrictivas se olvida incluir en los platos los germinados o semillas, a pesar de que tienen muchas y muy buenas propiedades para la salud. Su incorporación en la comida es sencilla, siendo principalmente empleados en la elaboración de ensaladas o bocadillos. Entre los más recomendables, por sus beneficios saludables, se encuentra el ajo, las lentejas, los garbanzos y la alfalfa. Pero, ¿por qué hay que tomarlos?
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Ajo
El ajo es muy conocido por sus propiedades para la salud y, en concreto, para evitar o mejorar los resfriados, entre otras patologías. Sin embargo, sus beneficios para el organismo van aún más allá. Este alimento tiene un gran efecto antibiótico y antihipertensivo, además de ayudar en la prevención de otras enfermedades como el cáncer de estómago.
Lentejas
Aunque muchas veces se suelen cocinar estofadas, sus posibilidades gastronómicas para incorporarlas en la dieta y no ganar peso son innumerables. Por ejemplo, se pueden tomar en ensalada. En el mercado se pueden encontrar una gran variedad de lentejas. En general, todas tienen en común su gran aporte de fibra. Además, son ricas en vitaminas A, B1, B2, B3 y B12, así como en vitamina C y E.
Entre su aporte al organismo, también destaca el alto nivel de minerales como el hierro, potasio, hierro y fósforo. Unos beneficios con los que ayudan, entre otras ventajas, a limpiar la sangre.
Garbanzos
En este caso, sucede como con las lentejas. Habitualmente se consumen en potajes o cocidos como el madrileño, pero se pueden tomar en ensaladas de una manera mucho más ligera y con menos calorías.
Sus propiedades para la salud se centran en su capacidad para ayudar a regular el colesterol, siendo también muy útiles para hacer frente al cansancio mental y a la carencia de flexibilidad muscular. Igualmente, es un alimento idóneo si se padecen o se quieren prevenir enfermedades coronarias.
Unos beneficios para la salud que se obtienen porque los garbanzos son ricos en hidratos de carbono, vitaminas C y E, proteínas y minerales como el hiero, potasio, magnesio y calcio.
Alfalfa
Hoy en día, estas semillas prácticamente han quedado relegadas a la alimentación animal, aunque en la antigüedad eran de consumo humano. De hecho, tienen importantes beneficios para la salud, sobre todo, para los casos de anemia y osteoporosis.
Entre sus principales aportes al organismo figuran las vitaminas y minerales entre los que destaca el calcio, llegando estas semillas a tener más aporte que, por ejemplo, un vaso de leche.