Los objetivos y deseos del corazón, aquellos que se anhelan con intensidad, también producen novedades significativas en la existencia. Te damos cinco consejos para afrontar un gran cambio en tu vida sentimental.
Indice
1. Que tu felicidad no dependa completamente de ese hecho
La alegría y la ilusión crecen cuando te enfocas en un propósito que te ilusiona. Sin embargo, no confundas la perspectiva integral con lo concreto. Disfruta del cambio, más allá de sus dificultades. Pero no descuides otras áreas que también te aportan bienestar y experiencia.
2. Consejos para afrontar un gran cambio en tu vida sentimental: con valentía, decisión y determinación
Los grandes cambios en la vida sentimental también pueden producir vértigo, temor, dudas o inseguridad. Del mismo modo, pueden surgir sensaciones contradictorias. Alimenta tu determinación para enfocarte en aquello que deseas o en la realidad de lo que está pasando. Los cambios más relevantes no siempre surgen por iniciativa propia. Más allá de la causa, es esencial atender lo que está ocurriendo.
3. Evita las comparaciones negativas
Los cambios en tu vida sentimental pueden intensificar la nostalgia con otras etapas del pasado o, por el contrario, la idealización de un capítulo que se percibe como perfecto. En otros casos, surge la inercia de trasladar el centro de la comparación a un aspecto externo. Pues bien, tampoco compares tu etapa sentimental con la realidad de otras personas de tu entorno que pueden encontrarse en una situación similar o completamente distinta.
4. Resiliencia para afrontar un gran cambio en tu vida sentimental
Todo cambio implica avanzar hacia lo nuevo y aceptar que hay otros aspectos que quedan atrás. En definitiva, es un proceso que se transforma en una fuente de evolución e innovación. ¿Cómo incrementar la resiliencia cuando se produce un giro en tu vida sentimental? Conecta con tus apoyos más importantes. Por ejemplo, aquellas personas que te acompañan de algún modo.
5. Hazte nuevas preguntas
Los grandes cambios también generan nuevas preguntas: te posicionan en un punto distinto. No te dejes llevar por la inercia de los acontecimientos: actúa de manera proactiva.