Un recibidor pequeño también puede tener mucho encanto. Sin duda, cuenta con la perspectiva ideal para lucir su mejor versión: la entrada al hogar ofrece un universo de posibilidades. Sin embargo, la estancia también puede alcanzar una transformación significativa a partir de algunos cambios sencillos. ¿Cómo embellecer un recibidor pequeño? En Decorablog compartimos seis consejos.

1. Revisa si se adapta a tu rutina diaria: ¿El espacio cubre tus necesidades?

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Una decoración eficaz del recibidor puede simplificar de forma notable diferentes tareas y gestiones en el día a día. ¿Es un espacio que te resulta verdaderamente práctico en la experiencia diaria o, por el contrario, percibes alguna carencia en el entorno? Puedes describir por escrito los aspectos positivos y esos cambios que tanto echas de menos. De este modo, realizas un mapa de la situación.

2. Detalles que ocupan muy poco espacio, pero realzan la belleza

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Potenciar la sensación de amplitud en la entrada al hogar, cuando el recibidor es bastante pequeño, puede parecer un objetivo difícil de alcanzar. Sin embargo, la percepción del lugar cambia cuando está decorado con detalles que adornan el contexto, pero ocupan muy pocos centímetros. De hecho, uno de los elementos clásicos que suele situarse en este rincón es el espejo. Una pieza que aporta una sensación de profundidad gracias a la perspectiva que muestra el reflejo.

3. Cuida la organización de un recibidor pequeño: medios prácticos y funcionales

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Un recibidor pequeño puede mostrar su perspectiva más estética por medio de una composición bonita. Pero el orden es otra de las necesidades que es posible atender en el lugar.

Existen diferentes piezas que cumplen esa función, por ejemplo, un perchero, una cómoda, un banco, un zapatero… Evidentemente, no es necesario que todos los ingredientes mencionados formen parte de la decoración del lugar. Sin embargo, sí puedes seleccionar aquellas propuestas que se ajustan a tu estilo de vida.

4. Revisa el punto focal: busca una nueva perspectiva

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La percepción de un recibidor pequeño puede experimentar un punto de inflexión cuando la decoración del lugar gira en torno a un nuevo punto focal. Pues bien, es probable que haya que crear esa perspectiva por medio de la integración de un elemento atractivo. Por ejemplo, un cuadro, una lámina o un espejo.

En otras estancias de la casa, el punto focal también puede formar parte de la propia estructura del edificio. Por ejemplo, quizá sea recomendable destacar las vistas que se disfrutan desde una ventana. Sin embargo, las opciones suelen reducirse en una zona de paso como el recibidor. Si el recibidor está conectado con otra estancia del hogar, es posible dirigir la atención hacia ese lugar.

5. Detalles que quieres mantener

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Hacer mejoras en un recibidor pequeño no significa cambiar cada uno de los detalles que se integran en el lugar. La entrada al hogar también presenta otros aspectos que merecen seguir formando parte de ese escenario.

Por ello, visualiza la estética y la distribución actual del recibidor (y a ti mismo cuando regresas a casa o sales a primera hora para ir al trabajo). ¿Qué detalles quieres mantener por su funcionalidad, estética o valor emocional?

6. Decora las paredes sin recargar esta perspectiva

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Las paredes adquieren un mayor protagonismo en la decoración de un recibidor pequeño. Sin embargo, aunque esta perspectiva puede transformar el conjunto de la entrada a casa, es recomendable no recargarla con un exceso de adornos que quizá lleguen a crear una sensación de ruido visual en un recibidor que no posee una gran amplitud.

Si quieres mejorar la decoración del hogar puedes empezar a hacer cambios en el recibidor por una sencilla razón: la entrada a casa es especialmente significativa por lo que representa.