Tener un tipo de piel grasa puede contribuir a la aparición de numerosos problemas estéticos y dermatológicos como el acné, los puntos negros y las espinillas. Por ello, comprendemos que busques información sobre cómo cuidar la piel grasa, con el fin de prevenir o atenuar estos problemas.
En este artículo te contamos por qué es importante cuidar tu piel y cómo tratar la piel grasa del rostro con nuestros consejos y recomendaciones de productos naturales.
Indice
¿Cómo saber si mi piel es grasa?
Antes de ir directo al grano respecto a los cuidados de la piel grasa, es preciso conocer algunos de los elementos que distinguen a este tipo de piel. De esta forma, podrás saber si los consejos y recomendaciones que te daremos en este post son apropiados para ti.
La piel grasa es un tipo de piel que se caracteriza por tener un exceso de sebo y, por lo tanto, presentar un aspecto brillante y a veces grasoso. Pero estas no son sus únicas particularidades. ¡Descubre a continuación algunas de las señales más evidentes que confirman que tu rostro tiene estas características!
- Exceso de brillo: la piel grasa suele tener un aspecto brillante, especialmente en la conocida como zona T, conformada por frente, nariz y barbilla.
- Poros visibles: este tipo de piel tiende a tener poros más grandes y visibles, especialmente en la zona T.
- Acné: la piel grasa es más propensa a sufrir de acné debido al exceso de sebo.
- Puntos negros: el exceso de sebo también puede contribuir a la aparición de puntos negros en la piel.
- Deslizamiento: la piel grasa suele tener una sensación de “deslizamiento” debido al exceso de sebo.
No obstante, a diferencia de lo que muchos dan por sentado, existen numerosos tipos de piel, no solo la seca, la mixta o la de tipo grasa. Por ello, te recomendamos acudir a un dermatólogo para que determine cuál es tu tipo de piel y te recete los mejores productos y tratamientos.
¿Cómo cuidar piel de la cara grasa?
Si ya sabes que tu piel es grasa, podemos ayudarte con unos consejos y remedios caseros que te ayudarán a prevenir y atenuar las molestas consecuencias que acarrea la producción excesiva de sebo.
Comencemos con los consejos más generales gracias a los cuales podrás prevenir la aparición del acné, espinillas, puntos negros y otras afecciones de la piel.
Limpia tu piel a diario:
La limpieza diaria de la piel, varias veces en el día, es muy eficaz para eliminar el exceso de grasa, la suciedad y el maquillaje. Utiliza un limpiador suave y tómelo con una toalla húmeda o un disco de algodón.
De igual forma, utilizar un jabón de azufre, purificador u otro recomendado para la limpieza de pieles grasas puede ser una excelente solución para prevenir la producción excesiva de sebo.
Utiliza un tónico:
Después de limpiar la piel, aplica un tónico para equilibrar el pH de tu piel y eliminar cualquier residuo de suciedad y limpiador. El tónico también puede ayudar a minimizar los poros y controlar la producción de grasa.
Aplica un serum:
Luego de utilizar el tónico más apropiado para tu piel, puedes aplicar un serum hidratante que ayude a hidratar la piel sin añadir grasa adicional. Un serum que sea apropiado para tu tipo de piel contribuye a su nutrición, controla el cebo y te ayuda a recuperar el equilibrio de tu piel.
Utilice una crema hidratante ligera:
Aplica una crema hidratante ligera, específica para pieles grasas, con el fin de ayudar a mantener la piel hidratada sin añadir grasa adicional. Busca cremas que contengan ingredientes como la vitamina C, el ácido hialurónico o la niacinamida, pues son ingredientes que pueden ayudar a controlar la producción de sebo y a minimizar la apariencia de los poros.
Use protector solar:
Sea cual sea tu tipo de piel, es importante utilizar protector solar todos los días, incluso si no sales de casa, ya que la exposición a los rayos UV puede dañar la piel y aumentar la producción de sebo. Te recomendamos utilizar un protector solar con un FPS de al menos 30 y aplícalo generosamente sobre todo el rostro y el cuello. Según expertos la cantidad adecuada de protector solar debe cubrir los dedos medio e índice.
Remedios naturales para cuidar la piel grasa
Con ingredientes naturales que seguramente tienes en casa también puedes cuidar de tu piel grasa con el objetivo de prevenir y atenuar sus consecuencias. ¡Veamos cuáles son estos productos naturales para la piel grasa!
- Miel: la miel es un ingrediente natural hidratante que también tiene propiedades antimicrobianas. Puedes utilizarla como mascarilla una vez a la semana para ayudar a controlar la producción de sebo y a mantener la piel hidratada.
- Jugo de limón: el jugo de limón es astringente y ayuda a controlar la producción de sebo y a minimizar la apariencia de poros. Aplícalo directamente sobre la piel como tónico o agrégalo a su crema hidratante para una hidratación suave.
- Aceite de coco: el aceite de coco es hidratante e igualmente cuenta con propiedades antimicrobianas. Utilízalo como tratamiento nocturno para ayudar a controlar la producción de sebo y a mantener la piel hidratada.
Espero que tras leer este post hayas aprendido cómo cuidar la piel grasa y, así, mantener su apariencia lozana y saludable. Si tienes otros consejos que nos pueden servir para conseguir los mismos objetivos te animamos a compartirlos en los comentarios.