La soledad es una necesidad que puede buscarse de forma intencional. Cuando estás a solas, también proteges tu propio espacio. Aunque compartas tu vida con otras personas, su compañía no sustituye el encuentro contigo mismo.
Indice
1. Lectura
Los libros de autoayuda, coaching, psicología positiva y crecimiento personal ofrecen herramientas prácticas para alcanzar la felicidad. La lectura es uno de los planes de ocio que enriquece la soledad con la compañía de personajes que inspiran valores importantes.
2. Pasear
Un paseo es uno de los planes que puede vivirse en compañía o en soledad. Caminar durante un rato te permite encontrar tu propio espacio en cualquier instante de la rutina cotidiana. Durante el trayecto, puedes potenciar la presencia consciente al cultivar la atención plena. Si lo necesitas, también encontrarás unos minutos de calma para pensar en una cuestión que quieres solucionar.
3. Viajar
Los viajes, con frecuencia, se planifican en compañía de familia, pareja o amigos. Pero muchos viajeros viven esta aventura de forma individual. No condicionan este proyecto a la necesidad de compartirlo con alguien más. Cualquier escapada te aporta la posibilidad de conocerte mejor a ti mismo. Pero los viajes en solitario son especialmente importantes para estar a solas.
4. Cine
La inspiración para ser feliz puede brotar durante la lectura de un libro, en un viaje o en un paseo. Pero el cine también ofrece respuestas a preguntas universales sobre el amor, la amistad, el ser humano y la vida. Algunas historias se convierten en el refugio particular de aquel que vuelve a reencontrarse con el relato de una historia que le encanta.
5. Fotografía de paisajes
Algunas de las imágenes que te rodean se convierten en atemporales cuando capturas su esencia en fotografías que poseen un valor emocional para ti.