Las estanterías abiertas ofrecen muchas posibilidades en las cocinas. Por ello, están presentes en estancias grandes, medianas y pequeñas. Como en cualquier otro tipo de entorno, es importante cuidar el orden. De lo contrario, la disposición de los elementos situados en los estantes puede aumentar el ruido visual. El orden es un término que está directamente relacionado con la decoración ya que mejora la estética de un lugar. Hoy te damos seis consejos para realzar la organización.
Indice
1. Vajilla a la vista
¿Qué puedes poner en los estantes para sumar practicidad y belleza en el ambiente? Las piezas de vajilla forman una composición perfecta. Los platos y demás elementos son artículos de uso habitual. Pero, además, aquellos modelos que poseen un diseño bonito tienen un alto valor ornamental. En consecuencia, adornan la cocina.
2. Potenciar la simetría entre los estantes
Cuando en una cocina hay varias estanterías abiertas, todas ellas tienen una relación entre sí. La decoración de uno de los estantes puede mantener su armonía con el entorno próximo. De este modo, la simetría es uno de los conceptos que puede guiarte en el proceso de decoración. Cuando los estantes presentan una composición simétrica, tienen una estructura similar y un mismo peso visual.
3. Espacio vacío
La integración de estantes abiertos es clave para incrementar el espacio de almacenaje en la cocina. Las estanterías, perfectamente situadas en una de las paredes, completan el interior de los armarios. Y, por ello, ofrecen muchas posibilidades para organizar el entorno a través de una tendencia que triunfa hoy en día: dejar elementos a la vista. Planifica la composición de los elementos que vas a colocar sobre la superficie de cada estante.
Pero evita llenar en exceso la base. El espacio vacío es esencial para que cada ingrediente muestre su mejor versión. De lo contrario, las estanterías pueden convertirse en una fuente de desorden y de caos visual.
4. Pocos artículos de cocina sobre la encimera
La encimera es una de las zonas más importantes de la estancia. Un entorno que puede enmarcar algún elemento de cocina cuidadosamente seleccionado y situado a la vista. Es recomendable no recargar la base con un exceso de herramientas y utensilios. Los estantes abiertos te proporcionan el espacio que necesitas para poner en un lugar próximo y accesible algunos de los productos que utilizas habitualmente para elaborar nuevos platos o preparar la presentación de la mesa. Una encimera recargada con un exceso de piezas resulta poco práctica.
5. Detalles naturales
Cualquier estancia del hogar se transforma por medio de la integración de pequeños detalles naturales, por ejemplo, flores y ramas verdes. ¿Dónde colocar un adorno de estas características en una cocina con estantes abiertos? La composición de los estantes puede estar integrada por utensilios prácticos y, también, ingredientes que realzan la belleza estética del conjunto. Un conjunto de ramas verdes en un tarro de cristal forma un binomio perfecto.
6. Guarda los pequeños electrodomésticos en el interior de los armarios
El almacenaje abierto y cerrado forman parte de las cocinas con estantes que contienen elementos a la vista. Sin embargo, es importante que selecciones cuidadosamente aquello que sitúas en las estanterías. ¿Qué productos utilizas de forma frecuente y quieres tener al alcance cuando realizas diferentes tareas? Es posible que en la lista de elementos prácticos también anotes algunos pequeños electrodomésticos. Sin embargo, es mejor que los guardes en el interior de un armario. De este modo, no quedan cables a la vista en la cocina. Y aparato está más protegido.
Por tanto, orden, organización y decoración son tres conceptos que están muy unidos en una estancia práctica y funcional. Ingredientes que conviene cuidar en una cocina con estantes abiertos.