El color blanco es universal en el ámbito de la moda, el arte y la decoración. Permite crear múltiples combinaciones en las que dicho tono se convierte en protagonista. Sin duda, su claridad puede destacar en muebles, paredes, textiles y techos. Pero su belleza también luce su mejor versión en su relación con un entorno en el que surgen otros matices importantes. Hoy proponemos ocho combinaciones en las que este tono es uno de los protagonistas.
Indice
1. Blanco, negro y madera: decoración con un toque industrial
Cada elemento imprime un acento concreto en la composición final. Sin embargo, la mezcla del negro, el blanco y la madera puede integrarse en un espacio que tiene un toque industrial, por ejemplo. Lo más importante es decidir la proporción de cada ingrediente puesto que el aspecto cuantitativo también influye en el resultado definitivo.
2. Blanco y beige: la perfecta continuidad visual
El blanco y el negro, como hemos comentado antes, refleja la intensidad de un bello contraste. El blanco y el beige, por el contrario, se funden en una perfecta continuidad visual en la que, por el contrario, es posible percibir una diferenciación entre los elementos que componen la combinación. Aunque se trata de dos acabados muy parecidos, no son idénticos en esencia.
3. Blanco, negro y rosa: una elección con un toque dulce
¿Qué estilo quieres dar a tu hogar o a una estancia en concreto? Es una pregunta que conviene responder antes de decidir qué colores van a definir los detalles del lugar. La suma del negro, el rosa y el blanco merece una atención especial. Es un esquema que ofrece diferentes versiones puesto que el negro también puede sustituirse por el gris.
4. Blanco y azul: una combinación relajante
El blanco es uno de los tonos que está presente en el paisaje natural. Queda perfectamente representado en la belleza de distintas flores, por ejemplo. Un acabado natural que también se fusiona con acierto en otros elementos como el azul. Ambos crean un binomio acogedor como muestra la estética de la cocina que puedes observar con detenimiento en la imagen del artículo.
5. Blanco, marrón y azul
Para simplificar el proceso de decoración en un espacio conviene concretar los detalles principales. Por ejemplo, es recomendable decidir el número de colores que va a formar parte de un lugar.
Las composiciones que están integradas por dos o tres elementos son muy atractivas. El blanco, el marrón y el azul muestran un esquema en el que el tono al que hacemos mención en el artículo destaca como protagonista.
6. Blanco y verde
El blanco es un tono que está presente en estancias que lucen un look acogedor y relajante. Pues bien, existen otros colores que realzan la serenidad en un espacio. El verde es el perfecto ejemplo de ello.
Un tono que, además, también alimenta la creatividad. Por este motivo, puede formar parte de la estética de un espacio de trabajo que, a través de la elección de los colores, crea una vinculación con el paisaje.
7. Blanco y dorado, una combinación con un toque festivo
Es una combinación de color que puedes utilizar para dar a tu casa una atmósfera navideña durante las fiestas de fin de año. El dorado aporta un toque de sofisticación por eso, es una combinación que, junto a otros matices cromáticos, también aporta una inspiración positiva en la planificación de eventos especiales.
8. Blanco y gris: luminosidad en estado puro
Hay múltiples composiciones que realzan el protagonismo del color blanco en la decoración de un hogar. Si buscas una propuesta muy luminosa, complementa dicho acabado con la suma del blanco.
¿Qué otras combinaciones quieres añadir a una lista en la que el blanco se sitúa como el hilo conductor?