La mesa es una pieza clave en la cocina o el comedor. Y existe un diseño que se convierte en una prioridad en estancias en las que hay que aprovechar perfectamente cada centímetro. Una mesa extensible es la solución perfecta en ambas zonas. Enumeramos los motivos a continuación.
Indice
1. Se adapta a las necesidades del momento
Es un diseño que cambia su aspecto con la máxima sencillez. El tablero se amplía de forma significativa cuando se sientan más comensales alrededor de la mesa. Por el contrario, el mueble muestra un formato muy compacto en otros momentos de la jornada. En consecuencia, crea una agradable sensación de orden y amplitud en aquellos instantes que no giran en torno a la comida o la cena. Una mesa extensible es el vivo reflejo de la evolución y el cambio en la vivienda. En la propia rutina cotidiana, se renueva el paisaje del salón y la cocina en función del horario.
2. Ideal para todo tipo de casas (clásicas y modernas)
Es habitual imaginar que este diseño queda especialmente bien en una estancia pequeña. Sin embargo, su presencia en una habitación no está determinada por el número de metros cuadrados disponibles.
En cualquier cocina o comedor, más allá de la superficie existente, es posible elegir un modelo de estas características. Por ejemplo, permite dar amplitud a la zona del comedor. Y, de este modo, el look del conjunto de la habitación proyecta una mayor armonía y orden a nivel visual.
3. Diseños multifuncionales para hogares muy prácticos
Una mesa que es extensible destaca principalmente por su practicidad. Es un diseño cómodo y funcional que se adapta a distintos escenarios de la vida familiar. Siempre está lista para dar la bienvenida a nuevas visitas. Pero también puede proporcionar el soporte necesario en otros instantes, por ejemplo, en algunos momentos puede convertirse en un espacio de trabajo. En otros momentos, la mesa puede enmarcar un espacio creativo en el que los niños juegan durante la tarde.
En definitiva, es un mueble que te permite crear un entorno práctico en la zona que tú desees: en el comedor o la cocina. Una decisión que no solo puede estar relacionada con la distribución del inmueble, sino también con tus preferencias y estilo de vida.
4. Mucho estilo: la estética también importa
Las mesas extensibles ofrecen esa ventaja añadida que resulta muy práctica en los hogares actuales. Pero su diseño también muestra el valor de la estética y el estilo propio. El amplio catálogo de colores, formas y diseños muestra que ese mueble puede convertirse en una de las piezas más especiales de la cocina o el comedor.
Un modelo que, además, puede enmarcar bonitos detalles decorativos como, por ejemplo, un jarrón con una elegante composición floral que añade un toque de frescura en la vivienda.
5. Son muy acogedoras en todas las ocasiones
No importa cuántos comensales haya en la mesa. Las mesas extensibles son muy acogedoras por sus propias características. Ten en cuenta que se adaptan a aquellas situaciones en las que solo hay dos comensales en la mesa o, por el contrario, reúnen a un grupo más numeroso a su alrededor.
Sin embargo, en todas las circunstancias resultan muy cómodas y acogedoras en la práctica. Por tanto, son mesas que se convierten en espacio de conversación y comunicación en la rutina cotidiana o en las celebraciones especiales. A veces, no es fácil elegir una mesa que se integre perfectamente en el plano de la estancia. Y en esos casos, es fundamental comparar alternativas para dar con el modelo que se suma con la máxima naturalidad a la cocina o el comedor.