DeportesFeatured

Cardinals se reencuentran con la victoria, gracias a Cowboys

La defensiva de Dallas sigue siendo un ‘flan’ en la NFL, y ahora la ofensiva también se atascó

En una noche en que todo parecía decir lo contrario, los Arizona Cardinals decidieron cambiar el guion. En el emblemático estadio de Arlington, los Cardinals se impusieron a los Dallas Cowboys por 27-17, poniendo fin a una racha de cinco derrotas consecutivas que los había colocado al borde de la desesperación.

Un arranque tormentoso, una reacción contundente

El partido inició con Cowboys que parecían listos para dominar: tan sólo en su primera posesión, Dallas avanzó con facilidad hasta la zona de ataque de Arizona. Pero la marea cambió pronto. Una vez que los Cardinals lograron frenar la ofensiva rival, se encaminaron hacia un triunfo que —aunque tardó en fraguar— terminó siendo absoluto.

La defensa de Arizona emergió con fuerza: bloqueos clave, capturas decisivas y una estrategia que neutralizó a una ofensiva de Dallas acostumbrada a imponer su ritmo. Mientras tanto, en el otro lado del balón, los Cardinals aprovecharon sus oportunidades con mayor contundencia.

Jacoby Brissett: el hombre del momento

Con su quarterback titular, Kyler Murray, lesionado —fuera por un problema en el pie—, la responsabilidad recayó en Jacoby Brissett. Y vaya que respondió. Con 21 pases completos de 31 intentos para 261 yardas y dos touchdowns, sin entregar intercepciones, Brissett vivió posiblemente la mejor noche de su trayecto con los Cardinals.

“Estoy aquí para ganar y para ser buen compañero”, dijo Brissett al finalizar el partido, evitando entrar en debates sobre si debe ser el titular permanente. Pero su rendimiento abre ya un gran debate en Arizona.

Marvin Harrison Jr. brilla y el juego toma forma

Al lado de Brissett, otro nombre emergió con luz propia: Marvin Harrison Jr.. El joven receptor consiguió siete atrapadas para 96 yardas, su mejor marca personal, y sumó un touchdown en el proceso. Su química con Brissett fue evidente y resultó clave para que los Cardinals tomaran ventaja en momentos decisivos del encuentro.

La defensa y los momentos que definieron el triunfo

Dallas tuvo su oportunidad, y de entrada parecía estar dispuesta a aprovecharla. Pero la defensa de Arizona no cedió. Las capturas de Calais Campbell (celebrando su partido número 250 en temporada regular) y de Josh Sweat, entre otros, fueron ingredientes del cambio de curso.

Un detalle revelador: los Cowboys, en la primera mitad, habían logrado avanzar casi sin oposición dentro de la zona roja, pero en las siguientes posesiones los Cardinals les arrebataron cada avance. La diferencia se construyó ahí: no sólo en atacar, sino en evitar que el rival lo hiciera.

El marcador habla: cuándo y cómo se construyó la ventaja

Los puntos fueron llegando con constancia para Arizona. Un gol de campo temprano, seguido por dos touchdowns antes del descanso, establecieron la base del triunfo: 17-7 al medio tiempo. Dallas consiguió acortar un poco la ventaja en la segunda mitad, pero nunca logró desequilibrar realmente el partido.

En el tercer cuarto, otro impulso para los Cardinals: un touchdown de Trey McBride y otro gol de campo extendieron la ventaja a 27-10. Dallas logró un touchdown en el cuarto período, pero el tiempo para reaccionar ya se les había agotado.

¿Qué significa para cada equipo?

Para los Cardinals, esta victoria tiene varios matices importantes:

  • Rompen una racha de cinco derrotas, lo cual aporta un nuevo aliento al vestidor.

  • Refuerzan el argumento de que Jacoby Brissett puede liderar al equipo con confianza.

  • Recuperan algo de credibilidad ante una marca de 3-5, que aún los dejaría lejos de los líderes, pero con esperanza renovada.

Para los Cowboys, el impacto es más severo:

  • Este resultado los coloca con marca de 3-5-1, alejados de los puestos de privilegio en la NFC Este y con pocas automatismos para revertir la tendencia.

  • La ofensiva, otrora explosiva, se vio contenida; la defensa volvió a mostrar debilidades en momentos clave.

  • La derrota plantea preguntas urgentes sobre su consistencia y si estarán en condiciones de competir por el título esta temporada.

Claves tácticas que vale destacar

  1. Terceros downs: Arizona los convirtió con éxito, mientras que Dallas cedió varios intentos decisivos. El dominio ahí fue claro.

  2. Turnovers y errores rivales: Los Cardinals aprovecharon desconexiones del rival y fallos puntuales que marcaron la diferencia en un juego parejo.

  3. Ritmo de juego adaptado: Brissett manejó bien los tiempos, encontró receptores y evitó que Dallas impusiera su habitual velocidad ofensiva.

  4. Mente fría en el momento clave: La experiencia combinada con juventud permitió a Arizona cerrar el juego antes de que el rival pudiera reaccionar de forma contundente.

Mirando hacia adelante

El triunfo da a los Cardinals la motivación para visitar próximamente a los Seattle Seahawks con la moral reforzada. Saben que todavía están fuera de playoffs, pero demostraron que pueden competir.

Dallas, por su parte, tendrá que reagruparse durante su semana de descanso para intentar corregir rumbo antes de volver a escena. Sin margen de error, su calendario no les dará respiros fáciles.

Una victoria que trasciende el marcador

Más que los puntos en la pizarra, este resultado marca un cambio de narrativa para Arizona: no sólo se trata de competir, sino de ganar cuando se necesita, de recuperar la esperanza y de demostrar que los errores del pasado no tienen por qué definir el futuro. Para Dallas, representa un toque de alarma: en la NFL, todo se paga y nada se perdona.

Botón volver arriba

Bloqueador de anuncios detectado

Por favor, considere ayudarnos desactivando su bloqueador de anuncios