Existen distintos ingredientes que adquieren una relevancia esencial en la formación de una relación de amor o amistad. La confianza se crea y se construye. El fortalecimiento del vínculo depende, en gran medida, del concepto que analizamos en el post. ¿Qué es la autodivulgación?
La capacidad de hablar de uno mismo ante el otro
Los temas de conversación pueden girar en torno a asuntos que no tienen una gran implicación personal. Cuestiones más superficiales que suelen estar muy presentes al inicio de una nueva relación. La autodivulgación, por el contrario, hace referencia a la información de valor que el protagonista comparte con el interlocutor. Una información que es un reflejo de su autoconocimiento e introspección.
La reciprocidad fortalece la asimetría en las relaciones. Pero dicha reciprocidad también se afianza en la libertad. Cada persona decide de forma consciente con quién quiere compartir un dato, por qué y cuándo. Del mismo modo, puede preferir no abrir su corazón para charlar sobre un tema íntimo. Que una persona comparta un dato no implica, a modo de causa y efecto, que el otro deba seguir la misma dirección.
La autodivulgación propicia el conocimiento mutuo
Para que exista una relación fuerte entre dos personas, es importante que ambas se conozcan de verdad. La aceptación es clave en la amistad o en el amor. Por medio de la autodivulgación, una persona muestra su esencia ante el otro. Y, por tanto, ofrece una información de valor para profundizar en el propio vínculo.
La persona exterioriza emociones, sentimientos, expectativas, opiniones y deseos. Una comunicación que no solo puede estar en relación con el nivel de confianza existente entre dos personas, sino con el estado de ánimo. Así ocurre cuando el sujeto necesita desahogarse, sentirse comprendido y escuchado.
¿Qué es la autodivulgación? Una forma de comunicación que propicia el encuentro sincero.