La dieta del limón es una de las más famosas. Sin embargo, a muchas personas les resulta imposible ser constantes en su cumplimiento por lo estricta que puede llegar a ser. Por eso hoy quiero comentarte ciertos aspectos sobre ella, para que veas que es posible seguirla durante bastante tiempo y sin tanto esfuerzo para obtener unos resultados magníficos. Eso sí, la dieta estricta, tal y como se conoce en muchos lugares, es recomendable no alargarla durante más de cinco días para no tener problemas de salud.
Indice
Agua tibia con limón para empezar
Puedes empezar el día bebiéndote un vaso de agua tibia con limón en ayunas. ¿Por qué en ayunas? Porque cuando el estómago está vacío sus principios activos actúan con más eficacia para alcalinizar el cuerpo y depurar el organismo.
No utilices azúcar ni nada por el estilo para endulzarlo si notas que el gusto es demasiado ácido. Lo que debes hacer es buscar la cantidad óptima de limón. Con medio o menos de medio puede ser suficiente.
Comidas aderezadas con limón
El limón ayuda a equilibrar el pH y alcalinizar el cuerpo. Eso significa que puedes emplear un chorrito de limón para sustituir el vinagre, prepararte unas pechugas con limón o mezclar con aceite y limón unas alcachofas de lo más saludables.
Gotas de limón a las botellas de agua
Beber agua es aburrido porque no sabe a nada. Lo saben algunas marcas que han lanzado al mercado botellas con gusto a naranja o a limón. Lo que yo te recomiendo es que viertas el jugo de medio limón en una botella de litro y medio para beneficiarte de sus propiedades.
No olvides que es un desintoxicante que depura tu organismo, su efecto diurético es casi inmediato, combate el estreñimiento, mejora las digestiones y hace que el hígado optimice sus funciones gracias a su contenido de antioxidantes.
Té de canela y limón a media tarde
¿Por qué no preparar un té de canela y limón? ¡Está buenísimo! Para ello necesitas el jugo de medio limón y su piel, un vaso de agua de 200 ml, una cucharada de miel de 25 gramos y una ramita de canela. Puedes tomártelo entre dos y cuatro veces por semana para mejorar tus digestiones y acelerar el metabolismo. Además, también es antiinflamatorio, por lo que es muy recomendable para combatir la retención de líquidos que hace que notes tu vientre hinchado.